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El confort del conductor no representa solamente un lujo, pues la somnolencia o el mal humor que nos produce la incomodidad nos hacen cometer errores o manejar de forma agresiva y peligrosa, por eso podemos decir que el aire acondicionado es uno de los sistemas de seguridad activa del vehículo.  En el interior de un vehículo en movimiento puede haber una diferencia de al menos 5ºC más con respecto al exterior, cuando la temperatura en el habitáculo supera los 30ºC comenzamos a cometer fallos y con un poco más de calor notaremos los mismos efectos que se experimentan con un índice de alcoholemia en sangre de 0,5 mg/l. Le puede interesar: Conoce más sobre nuestros servicios de mantenimiento y recarga de Aire Acondicionado Automotriz en nuestras instalaciones y a Domicilio. ¿Qué hace el aire acondicionado? Básicamente es un proceso que se encarga de quitar energía térmica al aire del interior para dirigirla al exterior, de manera que calienta el exterior para que se enfríe el interior por medio de un refrigerante que cambia de estado para absorber y liberar energía. El refrigerante circula por el interior de un tubo y entra en contacto con el aire del interior del vehículo, absorbe la energía térmica del aire y lo enfría para después enviarlo al habitáculo. En otra zona del tubo, el refrigerante está en contacto con el exterior del vehículo para liberar la energía térmica que ha acumulado y vuelve a su estado inicial, todo este proceso es un ciclo termodinámico.  Componentes del Aire Acondicionado  Compresor Su función es comprimir el refrigerante elevando la presión para que fluya a través de las tuberías. Se acciona por el motor del vehículo a través de una correa de transmisión, por eso sentimos cierta pérdida de potencia al encender el aire acondicionado. Condensador Se ubica frente al radiador y su función es enfriar el refrigerante calentado por la compresión. El gas caliente pasa por el condensador y disipa el calor al exterior por medio de tuberías, el refrigerante pasa de gaseoso a líquido. Filtros deshidratantes o acumuladores Su función es eliminar impurezas como partículas de aceite quemado o trozos de metal, además de la humedad del refrigerante, que entra en el filtro atravesando un agente secante e higroscópico (absorbe la humedad) para preservar el sistema.  Válvula de expansión o mariposa Se ubica delante del evaporador y separa las zonas de alta y baja presión del circuito de refrigeración, su función es regular el flujo de refrigerante que permita alcanzar un rendimiento óptimo para que la evaporación del líquido sea completa. Evaporador El refrigerante líquido se inyecta al evaporador a través de la válvula con gran presión, de manera que se expande. El aire frío que se genera entra al vehículo por la corriente del ventilador, la condensación generada es la que produce un pequeño charco debajo del vehículo. Filtro del habitáculo Se encarga de impedir el paso al habitáculo de partículas de polen, polvo, bacteria, gases nocivos y olores desagradables. Ventiladores Se encarga de ventilar el vehículo logrando que no se empañen los cristales y la climatización del habitáculo sea agradable.  Los componentes del circuito de refrigeración están conectados por mangueras flexibles o conductos de aluminio, de manera que se forma un sistema cerrado por el que circula el refrigerante.  El aire acondicionado además de enfriar también se encarga de deshumedecer el aire, con la ventaja que permite usarlo para quitar por ejemplo el vaho del vidrio panorámico. La desventaja es que puede resecar las mucosas si se usa durante mucho tiempo. ¿Qué fallas puede presentar el aire acondicionado? El filtro del habitáculo está sucio: Con el tiempo el filtro del aire acondicionado se va ensuciando, si está muy taponado impide que el aire frío llegue al habitáculo. Fugas del gas refrigerante: El aire acondicionado es un circuito cerrado, es posible que con el funcionamiento se puedan presentar algunas pequeñas pérdidas de gas refrigerante debido al propio sistema o alguna de las conexiones de las tuberías están flojas. Fugas del gas debido a una rotura: En este caso es importante la asistencia de un especialista, donde se tendrá que soldar o reemplazar la pieza y, a continuación, cargar el gas. Mantenimiento del compresor: En la mayoría de los casos olvidamos que el compresor es un motor que también requiere de mantenimiento y debe estar correctamente lubricado en todo momento. Si presenta una avería o mal funcionamiento es necesario realizar este proceso de inmediato. Fallo eléctrico: En ocasiones eso produce que los ventiladores no funcionen bien o que lo hagan únicamente de forma intermitente. Lo más recomendables que un especialista lo arregle. Malos Olores: Cuando notamos un olor desagradable al encender el aire acondicionado, seguramente tenemos el circuito lleno de hongos, bacterias y polvo, así que necesitará una limpieza a fondo para eliminar impurezas. Dependiendo del fabricante se estima que cada año el carro pierde entre el 15% y el 20% del gas que recorre el circuito, así que dependiendo del uso que le demos, podemos recargarlo cada uno o dos años, dependiendo de la temperatura y humedad de la zona donde vivimos.

El tema del cambio de aceite lo hemos tratado en múltiples ocasiones, pero verdaderamente hay mucho que decir. Por el hecho de que este aditamento es totalmente vital para el adecuado funcionamiento de nuestro motor, en tanto que su función es sostener lubrificadas las piezas móviles y resguardarlas de la corrosión. Resulta que nos hemos dado cuenta de que alrededor del tema del cambio de aceite hay un montón de mitos y de opiniones que hemos dado por determinadas toda la vida y resulta que estamos equivocados. De ahí que esta vez deseamos desmitificar ciertas de ellas, de esta forma vamos a poder estar seguros de no confundirnos en qué momento debamos hacer el cambio de aceite a nuestro carro. El aceite negrísimo quiere decir que hay que mudarlo de manera inmediata Probablemente pienses que cuando el aceite está obscuro se forma lodo en el motor o bien que ya no lubrifica como debe y se debe mudar. Esto es absolutamente falso. Cuando el aceite se vuelve negro quiere decir que está cumpliendo adecuadamente con su tarea. Pues limpia el motor y liberándolo de la suciedad que genera la combustión. De forma que sí el aceite se sostiene limpio con el tiempo, probablemente tienes el motor lleno de carbonilla y a puntito de reventar. Le puede interesar: Servicio de cambio de aceite a domicilio Puedo cambiar el aceite sin cambiar siempre y en todo momento el filtro Muchos consideran que es suficiente con mudar el aceite y el filtro puede soportar hasta la próxima vez, resulta que este es uno de los comportamientos más perjudiciales para nuestro motor. Cuando no sustituimos el filtro realmente lo único que conseguimos es botar el dinero que gastamos en aceite, pues en ese filtro es donde se guardan las impurezas de la combustión y al renovar el lubrificante lavamos el filtro y desprendiendo y manchando el aceite nuevo. Entre más aceite, mejor. Cuando medimos el nivel de aceite, la varilla nos marca los niveles mínimos y máximos, incluso de esta manera bastantes personas piensan que entre más lo llenen va a ser mejor. Este es un fallo grave, puesto que si se llena demasiado el cárter se puede producir calor excesivo por el incremento de la resistencia. Además de esto va a llegar más aceite a los tubos que van a quemar más lubrificante incrementando los depósitos en la cámara de combustión, con lo que se reduce la vida útil del motor. Le puede interesar: Servicio de cambio de aceite a domicilio Cambiarlo solamente cuando manda el fabricante Todas y cada una de las marcas de vehículos tienen un tiempo o bien un kilometraje determinado para el cambio de aceite. Siempre es mejor repasar periódicamente el nivel de lubrificante y cambiarlo cuando sea preciso. Cuando nuestro carro pasa una gran mayoría del tiempo en tráfico espeso, si bien no marca quilómetros el motor está encendido y el aceite prosigue circulando a temperaturas altas y a bajas revoluciones. De forma que la bomba no trabaja a su capacidad y el lubrificante va perdiendo propiedades. Es bueno añadir aditivos Muchos se venden como aditivos que sirven para reducir el consumo o bien prolongar la vida del aceite utilizado, tras mucho investigar se ha comprobado que esto no es cierto. Realmente el aceite que el fabricante aconseja para sus automóviles ya tiene los aditivos precisos conforme las especificaciones de cada carro. Cuando le ponemos otros extras podemos trastocar el comportamiento del lubrificante produciendo reacciones inopinadas en el motor. Le puede interesar: Mecánico a domicilio

El número de automóviles que no pasa la revisión técnico-mecánica aumentó desde el instante en que el 2016 los Centros de Diagnóstico Automotor incorporaron el nuevo sistema de control y vigilancia (Sicov) que inspecciona el procedimiento por medio de cámaras que reconocen la placa y que la Superintendencia de Transporte puede monitorear en tiempo real a través de un software. Cuando el carro llega al CDA, el Sicov toma una fotografía de la placa y un vídeo de reconocimiento del vehículo y del conductor, como de todo el proceso de la revisión. La información se manda al Runt y se valida el resultado, de forma que el software advierte cualquier inconsistencia y lanza una alarma y el certificado no se puede imprimir; si el vehículo no aprueba, hay quince días (15) de plazo para volverlo a llevar sin que se cobre de nuevo. Le puede interesar: Diagnóstico y revisión general automotriz La primera revisión de un carro particular debe efectuarse a los seis años de la matrícula y después es obligatorio hacerla anualmente; si no tenemos la técnico-mecánica nos exponemos a una multa que asciende a quince salarios mínimos diarios legales actuales y a que nos inmovilicen el vehículo. En diferentes ciudades de Colombia como Cali, Medellín, Bogotá, Cartagena y Pasto aparte de pararnos en un retén, pueden ponernos un comparendo electrónico. Para pasar por este trámite sin inconvenientes, hay múltiples consejos que podemos seguir: Carrocería: Si bien no es obligatorio, lo mejor es que llevemos el carro lo más limpio posible, asegurándonos de no tener golpes esenciales. Si tenemos sueltos los anclajes del parachoques hay que sostenerlos, contrastar que no tengamos remaches y tornillos sueltos o bien piezas colgando. Asimismo, que las puertas y los seguros funcionen bien, las ventanas suban y bajen suavemente, el limpiaparabrisas tenga líquido suficiente y las plumillas no estén gastadas, además de esto debemos mirar que los vidrios no tengan rajaduras. Interior: Asegurarnos que el pito funcione, los cinturones de seguridad estén bien anclados, los testigos del tablero enciendan y apaguen, el bloqueo del timón funcione y las sillas y reposapiés estén en buen estado. Filtros: Revisar los niveles de aceite, frenos, refrigerante, etcétera y cambiar los filtros que sea preciso. Servicio de: Sincronización para carros Neumáticos: Comprobar el estado del dibujo que debe tener una profundidad mínima de 1.6 mm. y revisar la presión de los neumáticos, la medida, el código de velocidad y el índice de carga han de ser iguales o bien superiores a los detallados en la ficha técnica, sin olvidar la llanta de repuesto, el gato, la herramienta y el equipo de seguridad. Le puede interesar: Mecánico a domicilio Alineación y suspensión: Es conveniente hacerle la alineación, antes de llevarlo a la revisión, contrastar que los muelles de la suspensión no estén oxidados o bien gastados, mirar si hay máculas de aceite dentro del tubo de amortiguación y asegurarnos de que el carro no rebote ni se balancee. Frenos: Comprobar discos y pastillas, mirar que no debamos hacer demasiada fuerza con el pedal y que no estén largos. El freno de mano debe bloquear el carro adecuadamente. Luces: Revisar que todas y cada una de las luces del carro funcionen y estén bien reguladas, incluyendo las de frenos, estacionamiento, reversa y las intermitentes, además de esto no han de estar fragmentadas o bien incoloras por el sol. Cilindro de escape: No ha de estar roto, estropeado o bien generando estruendos. Observar si sale humo al encender o bien apresurar el carro, por el hecho de que puede tener algún inconveniente. Gases: Es mejor pasar por el taller o solicitar un servicio de mecánico a domicilio para hacer un análisis de gases ya antes de presentarnos a la revisión. Como consejo, es conveniente que demos un camino ya antes de entrar al CDA, de este modo el motor y el catalizador pueden llegar a la temperatura perfecta de trabajo, además de esto se limpia el cilindro de escape para disminuir al mínimo las posibilidades de fallo. Documentación: Indispensable que el SOAT esté actual (hay que sacarlo 24 horas antes de ir a la revisión si no lo tenemos) y la matrícula del carro, aparte del pase del conductor que se presenta. Consulte: Servicio de cambio de aceite

Con el fin de mantener su vehículo en el mejor estado posible durante el periodo de cuarentena, expertos de la marca Peugeot elaboraron especialmente para www.talleresadomicilio.com estos consejos que ayudarán a los propietarios de vehículos de las diferentes marcas en especial de Peugeot a mantenerlo en buenas condiciones para que después de la emergencia sanitaria se pueda usar sin problema alguno. Aquí la sugerencias. Freno de Mano: Lo mejor es no utilizarlo, salvo que el vehículo quede estacionado en pendiente. Al accionar el freno se tensa un cable que frena el eje trasero y si queda accionado mucho tiempo puede generar problemas al desactivarlo. Para proteger el motor, enciende su auto una vez a la semana durante cerca de 10 minutos, así evitarás que se formen depósitos en los circuitos de combustible, líquido refrigerante y aceite. Neumáticos: Conviene inflarlos por encima de la presión recomendada, ya que si pierden aire durante el tiempo no se deformarán por el peso del vehículo. Procure no dejar el nivel de combustible por debajo de la mitad del tanque ya que podría sufrir averías. Líquidos: Revisar que todos los niveles estén en la medida correcta, para chequearlos con el mismo parámetro cuando se vuelva a poner en marcha el vehículo. Si su vehículo está en un lugar seguro, deje ligeramente las ventanas abiertas para que el habitáculo tenga ventilación y así evitar aglomeración de olores causados por la humedad. Esta medida también permitirá que los cauchos internos no se sequen y se peguen al vidrio. Carrocería: Para evitar la corrosión y protegerlo al máximo lo mejor es colocarle una funda, pero cuidado, es indispensable que antes de cubrirlo esté totalmente limpio para que no se raye la pintura. Cerramos con este truco casero: dejar un recipiente con arroz crudo en el habitáculo, esto ayudará a evitar la humedad y los malos olores que genera al estar las puertas cerrada por mucho tiempo.

Una de las grandes compras que hacemos en la vida es la de un vehículo, pero como no todos podemos o tenemos la capacidad adquisitiva de comprar uno nuevo recurrimos al mercado de los carros de segunda o utilizados. Para estar seguros que invertimos bien nuestro dinero es esencial que efectuemos una revisión general automotriz al carro escogido y de esta manera descubrir si tiene problemas ocultos. Una revisión general automotriz es un informe completo que acredite las condiciones óptimas del vehículo nos evitará disgustos, preocupaciones y gastos innecesarios, debido a que no solo debemos confiarnos únicamente de su apariencia exterior y un interior bonito, es indispensable que conozcamos su situación mecánica actual. ¿Qué es la revisión general Automotriz? Esencialmente es una revisión técnico mecánica y una inspección de los elementos exteriores y también interiores que puede pedir un comprador de un vehículo de segunda mano para saber su estado real, si bien asimismo lo puede pedir el vendedor para conseguir un avalúo y poder tener una operación de venta exitosa. Existen 2 formas de hacer la revisión general automotriz. Prueba de Vacío: Consiste en inyectar aire a presión en cada una de las cámaras de combustión para determinar fugas y el origen de esta, que puede ser por: Anillos o Válvulas (de escape o admisión) Prueba de Compresión de Motor: Consiste en conectar el medido de compresión en los cilindros del motor mientras está a su temperatura máxima de operación, hasta que el pistón este en lo más alto o la presión en el indicador llegue a su valor máximo. Se mide la presión desde el primer hasta el ultimo pistón; Un cilindro está en buenas condiciones si alcanza en la primera carrera del pistón el 70% del valor máximo de la compresión indicada por le fabricante.   Le puede interesar: Diagnostico y Revisión General Automotriz ¿Qué se realiza en una revisión general automotriz? Motor: Se comprueba su estado actual, examinando si existen fugas de compresión, valoración de los niveles de aceite, el estado del ralentí, si tiene ruidos, vibraciones o bien humos y su funcionamiento general. Frenos: Se analiza si existen fugas del líquido de frenos, se examinan los discos o bien tambores, las pastillas, las bandas y el estado del freno de mano. Suspensión: Se tiene presente el estado de los amortiguadores, las tijeras, los bujes y demás componentes del sistema de suspensión. Alineador: Se verifica el funcionamiento de la caja y la dirección del vehículo, si tiene pérdidas de aceite y vibraciones en la dirección. Llantas: Se comprueba si el desgaste es normal, la profundidad de los surcos y los posibles daños. Sistema eléctrico: Se efectúa una revisión para diagnosticar el funcionamiento de todos y cada uno de los accesorios y piezas. Le puede interesar: Mecánico a Domicilio Carrocería: Sirve para observar la estructura general del chasis, los cuadres grabados, parales, pintura, vidrios, boceles, bumper delantero y trasero, luces y persiana. En esta revisión es donde se puede saber si el carro ha sufrido un golpe fuerte. Interior: Se examina el estado de la tapicería, el techo, los parasoles, el tablero, la radio, el timón, las manillas y la palanca de cambios. Identificación: Sirve para determinar si los elementos de identificación han sido removidos o bien alterados o bien si el vehículo está reportado en centrales o bien tiene algún pendiente legal. Con la revisión general automotriz se identifica si la carrocería y el chasís son los originales y si tiene piezas repintadas o bien reparadas, asimismo si hay desviaciones de trayectoria y si la suspensión y el frenado son eficientes, con lo que es un paso fundamental para la adquisición de un carro utilizado.

Con el tiempo las piezas van perdiendo su rendimiento por desgaste y requieren volver a los parámetros iniciales marcados por el fabricante, con el fin de que el motor responda de manera adecuada en todas y cada una de las situaciones, para eso se realiza la sincronización. La sincronización es un procedimiento de mantenimiento que no sirve para arreglar averías, su cometido es hacer que las piezas de los sistemas de encendido, distribución y alimentación coincidan correctamente para que el vehículo recupere su eficiencia original. Le puede interesar: Desinfección y Prevención para su vehículo Sin embargo, hay una serie de fallas que se resuelven después de verificar, limpiar, revisar, calibrar y cambiar ciertas piezas que forman parte de la sincronización, por ejemplo: Pérdida de fuerza Este es un problema bastante frecuente, vamos acelerando y sentimos que el motor no nos responde como antes y la potencia ya no es la misma. Esta falla se soluciona con la sincronización de motor.En la sincronización se cambian las bujías, el filtro de combustible y de aire y se limpian los inyectores, de manera que nuestro carro recupere la potencia. Ralentí inestable El ralentí es el régimen mínimo de revoluciones por minuto a las que se ajusta un motor para sostenerse en funcionamiento estable sin necesidad de acelerar. Cuando el carro no controla bien las revoluciones y se acelera o desacelera de golpe decimos que está inestable. También es otro problema que se puede resolver simplemente con la sincronización, con el cambio de bujías y de filtros y limpieza de la válvula IAC, volveremos a notar que el ralentí recobra su estabilidad. Difícil encendido En ocasiones tenemos problemas para que el carro encienda, debemos girar la llave muchas veces mientras que lo sentimos toser hasta conseguir que arranque. Aunque el inconveniente puede ser de batería, hay otras causas que se resuelven con la sincronización. Le puede interesar: servicio de sincronización de motor En una sincronización se comprueba todo el circuito secundario de encendido, incluyendo la bobina, los cables de alta y las bujías, de forma que la chispa que permite que se inflame la mezcla de aire y combustible esté calibrada para saltar en el instante exacto. Consumo de combustible Seguramente nos ha pasado que haciendo exactamente los mismos recorridos y poniendo la misma cantidad de comburente, pareciera que cada vez nos dura menos, nuestro carro está consumiendo muchísimo más combustible por hacer el mismo trabajo. De nuevo el cambio de filtros, la limpieza de los inyectores y la sustitución de las bujías van a hacer que apreciemos que el consumo de combustible vuelve a los parámetros normales, ya que no tiene obstáculos ni excesos de carbón en ninguno de los componentes anteriores que podían estar obstruyendo el flujo de gasolina. Olor a gasolina No es normal que el olor a gasolina llegue al habitáculo e inclusive puede llegar a transformarse en un problema grave y peligroso, porque probablemente se deberá a una fuga y una de las causas la podríamos hallar en los inyectores. Con la sincronización se comprueba y limpia el sistema de inyección y se prueban los componentes para monitorear su funcionamiento, de manera que la causa del olor a gasolina desaparece cuando el problema está en los inyectores. Además de solucionar estos problemas puntuales, con la sincronización se emiten menos gases contaminantes al medio ambiente, el encendido es más eficiente y el motor se desempeña mejor en todos y cada uno de los sentidos.

Tener el vehículo quieto por mucho tiempo no es nada aconsejable para nuestro carro. Tampoco está mal conocer los elementos que más se ven afectar por esta situación para evitar que se dañen o imprevistos a futuro. Los neumáticos Lo idóneo es que lo dejes apoyado en unas borriquetas o “columnas” con el fin de que el peso no deforme los neumáticos. Si no es posible, lo mejor es que se inflen las ruedas con 1,5 bar más de presión que la recomendada, es importante consultar que medida les corresponde a tus llantas, dependiendo de sus dimensiones. De esta manera, la superficie en el suelo no queda tan plana apoyada en el suelo y no se deforma tanto, es recomendable cambiar el punto de apoyo sobre la superficie cada semana y revisar el aire de estas para mantenerlo en el ideal. De lo contrario, cuando salgas a rodar apreciarás vibraciones y ruidos en la dirección. El aire acondicionado El compresor (también se le debe hacer mantenimiento), el filtro y todas y cada una de las juntas de estanqueidad necesitan que pongamos en marcha el aire acondicionado. Por lo menos una vez al mes, preferiblemente cada 15 días a lo largo de unos minutos para estar en forma. Le puede interesar: Sincronización de Motor El motor Si bien podamos pensar que un motor no se desgasta si no lo ponemos en marcha, la realidad es que los propulsores necesitan funcionar con cierta periodicidad para no estropearse. Al no virar el motor, el aceite se escurre hacia el cárter, dejando las paredes de los cilindros y los segmentos de los pistones absolutamente secos. Esto produce óxido en el tubo y que los aros de los pistones se queden pegados. Todo esto «sobraría» si el motor se hubiera puesto en marcha por lo menos una vez por mes. Circuito de refrigeración En el motor de un coche hay un sistema para enfriar la mecánica. En los refrigerados por aire no hay problema. Pero en la enorme mayoría de propulsores, que son refrigerados por agua, los períodos de inactividad pueden provocar averías gravísimas. Si estás pensando en comprar un vehículo que se ha utilizado muy poco, nuestro consejo es que antes de seguir hagas un buen flushing, es decir, realizar un lavado y lubricación en todo el sistema del vehículo. Fugas de aceite En el momento en que un propulsor pasa mucho tiempo parado, las gomas se resecan y empiezan a agrietarse. Asimismo, se encogen un poco: ya tenemos inconvenientes de fugas. Si bien no lo parezca, las menos graves son las fugas hacia el exterior, porque esas las vemos y nos ponen alerta. El problema son las fugas internas, eminentemente, por los retenes de las guías de válvulas. Sí al poner en marcha el vehículo aceleramos y al soltar el pedal vemos un humo azulado en el escape, es un indicador de alarma. Le puede interesar: Cambio de Aceite Inconvenientes de distribución Si al encender el vehículo oímos un tic-tic-tac, en la parte alta del motor, debemos esperar unos 5 minutos con el fin de que se ceben y que el ruido desaparezca. Si transcurrido un tiempo prudencial el ruido persiste quiere decir que alguno de los taqués ha muerto por falta de uso. La dirección asistida Actualmente, la mayoría de los sistemas de asistencia a la dirección son eléctricos, pero, hasta el momento, eran hidráulicos. Lo mismo de siempre: si el aceite no circula con frecuencia por la cremallera de dirección y la bomba, los dos elementos se pueden deteriorar. Sistema de frenos El líquido de frenos hay que cambiarlo cada dos años, hagas cero o un millón de kilómetros. La razón es que este líquido está compuesto por un éter que es hidrófilo, por lo que absorbe el agua que hay en la atmósfera y poquito a poco se va hidratando. La presencia de agua en el circuito de frenos provoca 2 problemas: Reduce la temperatura a la que el líquido de frenos empieza a hervir. La ebullición de este líquido provoca burbujas que se comprimen y alargan el recorrido del pedal, llegando incluso a dejar de frenar. Le puede Interesar: Diagnóstico y Revisión General Automotriz Caja de cambios y diferenciales Largos períodos de inactividad hacen que se oxide la una parte de los piñones, sincronizadores, horquillas y que los retenes y juntas pierdan estanquidad.

Una de las peores pesadillas que podemos tener cuando vamos manejando es quedarnos sin frenos, especialmente si vamos por una carretera con muchas curvas o bien muy concurrida. Por tal motivo es esencial que siempre y en toda ocasión hagamos una revisión de nuestro carro y con mayor razón antes de salir de viaje, verificar el líquido de frenos y el estado de las pastillas, ya que esta situación nos puede suceder también en la ciudad. Quedarnos sin frenos es una de las averías más peligrosas que podemos tener, ya que el sistema de frenado es nuestra principal herramienta para protegernos de otros carros y de obstáculos en el camino; para resumir es esencial para mantenernos a salvo en el vehículo. Le puede interesar: Servicio de Diagnostico y Revisión General Si bien la prevención y revisión del vehículo es nuestra mejor arma para eludir quedarnos sin frenos, no podemos descartar que un día nos pase. Por estas razones y muchas otras desde www.talleresadomicilio.com deseamos darle unos consejos sobre lo que debe hacer ante esta situación. Mantenga la calma Claro, suena muy simple decir que sostengamos la calma cuando no estamos en ese escenario. Pero es de vital importancia que tengamos los nervios controlados para poder reaccionar y actuar de la forma más conveniente. Si entramos en pavor podemos proceder de una manera exagerada incrementando el riesgo. No apagues el motor En ninguna circunstancia debemos apagar el motor cuando notemos que nos hemos quedado sin frenos. Puesto que muchas funciones como la dirección hidráulica quedan desactivadas y eso va a hacer que sea más difícil maniobrar el carro. Quita el pie del acelerador Es una medida obvia, si estamos sin frenos lo último que deseamos es continuar acelerando. Además de esto si el carro tiene el control de crucero encendido deberemos asegurarnos de que está desactivado. Le puede interesar: Mecánico a domicilio Advierte a los demás Debemos procurar que todo el mundo comprenda que estamos en dificultades. Por tal motivo debemos encender las luces de urgencia y tocar el pito, de esta manera van a saber que deben conducir con cautela mientras que estemos cerca. Asimismo debemos abrir todas y cada una de las ventanas a fin de que la resistencia del aire ayude a reducir la velocidad (y de paso podemos gritar que vamos sin frenos). Observa cómo se siente el pedal del freno Si está duro y no se mueve puede haber una obstrucción bajo el pedal que podemos procurar retirar con el pie, o bien asimismo puede ser una avería en el circuito. Si está suave y llega hasta el fondo, seguramente le falta líquido de frenos o bien tenga algún conducto dañado. Le puede interesar: Servicio de Desinfección y Sanitización para carrosBombea el freno Cuando el líquido de frenos está bajo, se puede recuperar algo de presión en el sistema para detener el carro a través del bombeo constante durante un tiempo que seguramente nos parecerá exageradamente largo, pero debemos pisar a fondo muchas veces para procurar lograrlo. Si el pedal está duro, hay que probar con cualquiera de las otras recomendaciones. Le puede interesar: Mecánico a domicilio Frenar con cambios Con la caja mecánica podemos ir bajando suavemente de cambios, ponemos el clutch y pasamos de cuarta a tercera (por ejemplo) con el fin de que reduzca gradualmente la velocidad hasta sentir que el carro va más lento y repetimos hasta llegar a primera. Salvo que sea muy urgente reducir la velocidad, debemos cuidar a no hacer los cambios muy rápido, porque podemos perder el control del carro cuando llegamos a segunda o bien a primera. Utiliza el freno de mano ¡Con cautela!, no es cuestión de darle un tirón que nos mande dando vueltas por toda la carretera. Deberemos ir tirando poquito a poco del freno de mano hasta el momento en que sintamos que pierde la velocidad suficiente como para terminar de estirarlo y frenar por completo. Hay que tener en consideración que este procedimiento asimismo puede llevar un tiempo largo, puesto que solo frena con las llantas traseras. Ir de lado a ladoSi tenemos espacio a los lados, podemos procurar ir girando de forma brusca de un lado al otro múltiples veces para bajar la velocidad, puesto que girar la dirección del carro crea fricción y esto nos ayuda a reducir la velocidad, al realizar esta maniobra se debe tener en cuenta la velocidad, ya que puede producir un accidente a otro nivel. Le puede interesar: Mecánico a domicilio Utiliza las cosas para frenar Si nada funciona, tendremos que procurar reducir la velocidad a punta de darnos golpes con todo lo que encontremos, como las barreras de la carretera, el pasto crecido del camino o bien intentar meternos por una carretera que no esté pavimentada. Lo más esencial es mantener el timón muy firme, por el hecho de que si lo soltamos al sentir un golpe, vamos a perder claramente el control del carro.

La rotura de la correa de distribución es causa de una de las “averías más caras” y más frecuentes que deben de afrontar los propietarios de automóviles. Al igual que las averías del volante bimasa, en ocasiones ocurre de forma repentina, pero en otros muchos casos podría haberse evitado con una revisión. Aprende con nosotros como minimizar los riesgos. Puede interesarle: Diagnostico y revisión general Automotriz Es importante controlar el kilometraje y la antigüedad de la correa de distribución ¿Cada cuantos kilómetros se debe cambiar la correa de distribución? El fabricante de tu vehículo te recomendará un kilometraje máximo que debes recorrer antes de cambiar la correa (que oscilará entre 60.000 y 160.000 km, aproximadamente), te recomendamos consultar el de tu vehículo. En caso de que nos movamos frecuentemente en nuestros automóviles en entornos urbanos es recomendable acortar este kilometraje en un 20%, ya que la correa está “funcionando” a pesar de que el auto no recorra kilómetros (por ejemplo, en atascos/trafico, semáforos, pasos de peatones, etc). Le puede interesar: Mecánico a domicilio Un ejemplo claro: Si el fabricante dice que hay que cambiar la correa cada 120.000 km, no es lo mismo recorrerlos en 6º velocidad a 2.000 RPM por un autopista a 120 km/h que recorrerlos en ciudad a lo largo de miles de semaforos y trafico en para-arranca sin pasar de 4º velocidad en trayectos cortos. ¿Cada cuantos años se debe cambiar la correa de distribución? El fabricante del coche también recomendará un tiempo máximo de cambio de correa (Consulte el manual de su auto). Si no llegase a indicarlo,lo recomendable sería cambiarla cada 5 años o como mínimo revisarla minuciosamente y al menor síntoma de deterioro o presencia de algún daño (grietas, decoloración evidente, muescas, desgastes, etc.) cambiarla. Una correa puede llegar a los 7 – 10 años con garantías, pero siempre deberemos controlar su estado. Conducción en condiciones exigentes: si nos movemos mucho en entorno urbano (por ejemplo taxistas, trayecto diario al trabajo, etc.) o en climas extremos (muy frío (-10ºC), muy caluroso (+30ºC), muy polvoriento, fuera de carretera, muy húmedos, etc.) deberíamos revisar o cambiar la correa cada 4 años. Si no se cumplen los 4 años, deberemos controlar también los kilómetros y rebajar un 20% la cifra recomendada por el fabricante, todos estos factores influyen y se deben poner en consideración al momento de determinar cambiarla. Consideraciones a tener en cuenta Tensión de la correa: la correa de distribución debe estar correctamente tensada, por ello debemos vigilar la salud de los tensores. Si escuchamos algún ruido rítmico “que antes no se oía” cuando el coche está al ralentí (mínimo de RPM cuando esta prendido sin moverse el vehículo) o al acelerar en punto muerto con el coche parado, es posible que algún tensor esté afectado. Si no somos capaces de averiguar el origen del ruido, deberíamos llevar el motor a revisar. Te puede interesar: Diagnostico y revisión general automotriz Tenga cuidado con la bomba de agua: en muchos automóviles modernos la bomba de agua es arrastrada también por la correa de distribución. Nos hemos encontrado en varias ocasiones una rotura de la distribución provocada por una simple avería de la bomba de agua (gripaje, holguras, etc.). Si tu coche es así, exige siempre que te cambien la bomba de agua en cada cambio de la correa de la distribución. La bomba puede estar bien y aguantar toda la vida del coche, pero si no lo está, te arrepentirás de no haber pagado lo que cuesta una bomba nueva. Igualmente, si antes de llegar el cambio de correa observamos fugas de refrigerante, no dudemos en llevar el coche a revisar por si acaso. Cadena de la distribución Algunos coches en vez de una fuerte correa dentada llevan una cadena de distribución. A la hora de comprar el coche, es posible que el vendedor del concesionario te intente “vender la idea” diciendo que la cadena es indestructible, etc. Algunos fabricantes recomiendan periodos de cambio de más de 200.000 km. Es cierto que la cadena tiene sus ventajas, sobre todo en términos de fiabilidad, pero tampoco debemos olvidarnos de ella, ya que los tensores están sometidos a mucho más esfuerzo y desgaste, necesitando vigilancia. Además, pese a que la cadena apenas se desgaste, con el uso puede ir “estirándose”, lo que hace que pierda tensión y se vuelva más ruidosa, pudiendo provocar una avería. Esto ocurre con mayor frecuencia sobre todo cuando el conductor es aficionado a llevar el motor a niveles altos en las revoluciones (RPM). Si escuchamos un «tintineo» cuando el motor está al ralentí, deberemos llevar el coche a revisar con urgencia. ¿Cuánto cuesta cambiar la correa de distribución? No hay un precio «estándar» para el cambio de correa, ya que depende muchísimo del vehículo, marca, línea, gama y motor en cuestión. Estamos hablando de un trabajo que puede oscilar entre los $150.000 y los $1.500.000 en promedio para un «coche normal», ya que el precio del kit y la cantidad de mano de obra requerida es muy variable. Le puede interesar: Mecánico a domicilio El precio de la rotura de la correa de la distribución Si llega a producirse la avería y la distribución se sale de punto, lo más probable es que destrocemos parte del motor, al interferir el movimiento de las válvulas con el movimiento de los pistones. Es una lotería y la avería puede ser desde “poca cosa” a un daño de $15.000.000 millones de pesos Colombianos, dependiendo del tipo de motor y la suerte que tengamos. Como término medio, la avería suele rondar entre los $2.000.000 y $4.000.0000 millones pesos Colombianos en vehículos de gama media baja, así que es para tenerlo en cuenta. Que un vehículo tenga o no cadena de distribución se debe más a una cuestión de diseño y costes para la fabricación del motor, que por motivos de fiabilidad de un sistema u otro. Ambos son completamente válidos hoy día, pues al igual que la correa necesita ser sustituida cada equis kilómetros, la cadena también necesita mantener una serie de elementos en

Aparte de los mecánicos, de igual manera los apasionados al mundo automotriz han de saber la importancia del líquido de dirección para el buen funcionamiento de los automóviles. Esto nos ofrecerá seguridad en el momento de manejar y nos ahorrará mucho dinero en reparaciones, puesto que no todos saben lo costoso que acostumbran a ser los arreglos en la dirección del vehículo. Le puede Interesar: Diagnostico y revisión General Automotriz Por qué razón es esencial el líquido de dirección El sistema de dirección hidráulica se hace cargo de reducir el esfuerzo del conductor a fin de que se pueda guiar con confort y seguridad. Emplea energía hidráulica para ofrecer cooperación, la cual actúa a través de una bomba que trasfiere más fuerza al volante en todos y cada uno de los movimientos del volante, gracias al líquido que es emitido a la cremallera a través de las mangueras y cilindros del circuito. Así, el líquido de dirección efectúa prácticamente todo el trabajo, reduciendo de forma notable el esfuerzo del automovilista. Cuando efectuamos un control de líquidos en nuestros vehículos, la mayoría de las personas estamos familiarizados con la revisión de los niveles de aceite y refrigerante, dejando a un lado uno esencial que dirige las ruedas de nuestro vehículo. Sin él no podríamos hacer maniobras o bien giros de forma conveniente, fácil y cómoda. Le puede interesar: Mecánico a domicilio Señales de alarma La manera ideal, rápida y simple de saber si el líquido de nuestro auto se halla en buen estado y en los niveles perfectos es abrir el cofre y buscar el depósito: acostumbra a ser blanco o bien amarillo, tiene una tapa a rosca negra que generalmente tiene forma de volante y está en el motor o bien cerca de él. Al lado de la tapa hay una varilla (en algunos automóviles) que nos señala el nivel, la que asimismo nos servirá para comprobar el tono del líquido. Color y nivel van a ser nuestros primordiales indicadores de si hay que mudarlo por uno nuevo. Finalmente, es esencial saber qué líquido de dirección precisa nuestro vehículo. Esto aparece reflejado en el manual del propio vehículo. Nivel: El depósito tiene una marca de máximo y mínimo, justo entre estos 2 debe encontrarse el nivel del químico para asegurar el adecuado funcionamiento de nuestra dirección. Color: El tono del químico nuevo generalmente acostumbra a ser rosado, ámbar o bien colorada frambuesa; y si está viejo, cobrizo obscuro o bien negro. Esto es debido al desgaste y la polución y es señal de que debemos cambiarlo. Otro signo de que debemos mudar el líquido del vehículo va a ser si escuchamos ruidos al desplazar el volante hacia los extremos. Si los niveles son bajos, se va a sentir un rechinido y el volante va estar más rígido o “duro” de lo habitual. Le puede interesar: Fallas comunes de la bomba de dirección hidráulica Otros líquidos del auto Una vez abierto el cofre del vehículo, vamos a poder aprovechar para comprobar otros líquidos esenciales para su buen funcionamiento, como el aceite, refrigerante, líquido de frenos y agua del limpiaparabrisas.