Aparte de los mecánicos, de igual manera los apasionados al mundo automotriz han de saber la importancia del líquido de dirección para el buen funcionamiento de los automóviles. Esto nos ofrecerá seguridad en el momento de manejar y nos ahorrará mucho dinero en reparaciones, puesto que no todos saben lo costoso que acostumbran a ser los arreglos en la dirección del vehículo.
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Por qué razón es esencial el líquido de dirección
El sistema de dirección hidráulica se hace cargo de reducir el esfuerzo del conductor a fin de que se pueda guiar con confort y seguridad. Emplea energía hidráulica para ofrecer cooperación, la cual actúa a través de una bomba que trasfiere más fuerza al volante en todos y cada uno de los movimientos del volante, gracias al líquido que es emitido a la cremallera a través de las mangueras y cilindros del circuito. Así, el líquido de dirección efectúa prácticamente todo el trabajo, reduciendo de forma notable el esfuerzo del automovilista.
Cuando efectuamos un control de líquidos en nuestros vehículos, la mayoría de las personas estamos familiarizados con la revisión de los niveles de aceite y refrigerante, dejando a un lado uno esencial que dirige las ruedas de nuestro vehículo. Sin él no podríamos hacer maniobras o bien giros de forma conveniente, fácil y cómoda.
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Señales de alarma
La manera ideal, rápida y simple de saber si el líquido de nuestro auto se halla en buen estado y en los niveles perfectos es abrir el cofre y buscar el depósito: acostumbra a ser blanco o bien amarillo, tiene una tapa a rosca negra que generalmente tiene forma de volante y está en el motor o bien cerca de él. Al lado de la tapa hay una varilla (en algunos automóviles) que nos señala el nivel, la que asimismo nos servirá para comprobar el tono del líquido. Color y nivel van a ser nuestros primordiales indicadores de si hay que mudarlo por uno nuevo.
Finalmente, es esencial saber qué líquido de dirección precisa nuestro vehículo. Esto aparece reflejado en el manual del propio vehículo.
- Nivel: El depósito tiene una marca de máximo y mínimo, justo entre estos 2 debe encontrarse el nivel del químico para asegurar el adecuado funcionamiento de nuestra dirección.
- Color: El tono del químico nuevo generalmente acostumbra a ser rosado, ámbar o bien colorada frambuesa; y si está viejo, cobrizo obscuro o bien negro. Esto es debido al desgaste y la polución y es señal de que debemos cambiarlo.
Otro signo de que debemos mudar el líquido del vehículo va a ser si escuchamos ruidos al desplazar el volante hacia los extremos. Si los niveles son bajos, se va a sentir un rechinido y el volante va estar más rígido o “duro” de lo habitual.
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Otros líquidos del auto
Una vez abierto el cofre del vehículo, vamos a poder aprovechar para comprobar otros líquidos esenciales para su buen funcionamiento, como el aceite, refrigerante, líquido de frenos y agua del limpiaparabrisas.
